De la Sota apoya al candidato de Llaryora en Río Cuarto y complica a la ex de su padre

Antes de empezar, la campaña de Adriana Nazario, quien pretende disputarle la intendencia de Río Cuarto al peronismo orgánico, sufrió un golpe al mentón en su narrativa: Natalia de la Sota anticipó que apoyará la candidatura de Guillermo de Rivas, promovida por el actual intendente, Juan Manuel Llamosas, y avalada por Martín Llaryora.

Además de haber sido la última pareja de José Manuel de la Sota, Nazario cuenta con el apoyo de “La Militante”, una organización ultra delasotista que surgió en contraposición a La Cámpora, en momentos en que la tensión entre el líder cordobés y el kirchnerismo había escalado al punto que Cristina no envió gendarmes a Córdoba ante el motín policial.

Con De la Sota, De Rivas suma un apoyo de alto valor simbólico en la ciudad que el fallecido ex gobernador mimó y eligió para vivir. Además, el alineamiento de De la Sota es una señal hacia el liderazgo de Llaryora, aunque la diputada vaya a ser la única peronista del bloque HUC que rechazará la ley ómnibus. De esta manera, De la Sota demuestra que, sobre todo, es orgánica.

La ex pareja de De la Sota le complica a Llaryora la elección en la segunda ciudad de Córdoba

La lectura en el esquema de De la Sota es que Nazario se mantuvo ajena a la vida política de Río Cuarto y destrató la estrategia de Juan Schiaretti en los últimos cuatro años, cuando mantuvo un acuerdo con Sergio Massa y dirigentes de su espacio participaron en el Gobierno de Alberto.

“Llamosas se ganó el derecho de fijar la estrategia del peronismo de Río Cuarto, y Natalia va a apoyar al candidato elegido por él”, confió un dirigente delasotista al blanquear el patrocinio a De Rivas. “Nazario no quiso ser candidata en 2012, y luego se aisló del partido; su tiempo pasó”, es el análisis.

Adriana Nazario

Con De la Sota, De Rivas sumó el apoyo orgánico del PJ, de Llaryora y de Juan Schiaretti. Al lanzamiento del candidato no asistió el diputado nacional Carlos Gutiérrez, pero avisó que jugará con el candidato oficialista.

Si con su estrategia Llamosas retiene para el peronismo la segunda ciudad de la provincia, su llegada al esquema de Gobierno provincial está garantizada. Tiene una banca reservada como legislador, pero un triunfo lo ubicaría en un espacio de poder, ya sea en el propio Legislativo o quizá se haga un lugar en el Ejecutivo.

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